Las bajas temperaturas, o sencillamente mantener una temperatura agradable en cualquier época del año, es motivo más que suficiente para optar por opciones que favorezcan nuestro bienestar. Como actualmente el precio de los combustibles y de la energía eléctrica están tan caros en comparación con años anteriores, mantener un espacio cómodo y agradable puede resultar complicado, en cuanto a costes. Es por ello que una de las opciones más económicas y asequibles para lograr confort, es mediante la pintura aislante. Pero ¿realmente presenta ventajas la pintura aislante?
Aislamiento mediante pintura térmica, ¿en qué consiste?
Muchos espacios todavía carecen de un aislamiento térmico adecuado, razón por la cual gastan enormes cantidades de dinero en mantener una buena temperatura en su interior. No obstante, una manera muy sencilla de conseguirlo es mediante la pintura aislante o térmica. Y es que una vez que conozcas sus ventajas, sin duda querrás aplicarla en tu vivienda o edificio.
La pintura aislante es un tipo de pintura que aplica los principios de la nanotecnología a través de componentes cerámicos. Tiene la cualidad de eliminar los puentes térmicos solo con su aplicación, que es similar al de cualquier otro tipo de pintura. Posee una conductividad baja, y su efectividad en cuanto a aislamiento tiene que ver con su espesor, por lo que al llegar a 1 o 2 mm de espesor, alcanza un punto óptimo.
Ventajas de utilizar pintura aislante o térmica
Ahorro de energía. Al mantener una temperatura continua en el interior de una vivienda o edificio, puede ahorrarse hasta un 40 % en energía.
Durabilidad. A diferencia de otros tipos de pintura, la pintura aislante mantiene sus propiedades incluso por más de 5 años, lo que representa también un ahorro económico.
Antihumedad. Este tipo de pintura evita la formación de hongos y microorganismos dañinos, gracias a su efecto anticondensación. Además, es lavable.
Ignífuga y resistente a altas temperaturas. Otra de sus cualidades es que incluso ante temperaturas mayores a los 100 °C permanece inalterable. Por otra parte, es una gran barrera contra la propagación del fuego, evitando que se inicie o se extienda.
Sin necesidad de cámara de aire. Es muy común en estos tiempos decantarse por el aislamiento térmico por insuflado, pero se requiere de una cámara de aire. Si bien es posible crear dicha cámara utilizando pladur, hay quienes no desean hacerlo. La pintura térmica resuelve este problema, sobre todo en lugares de poco espacio. Así se evitan transferencias térmicas y se disfruta de una buena temperatura todo el año.
Mantiene la temperatura. Al aplicar pintura aislante, se nota la disminución de temperatura en varios grados en las épocas de calor. En exteriores, por ejemplo, al aplicar en terrazas o tejados, la superficie pintada no quema al tacto y en interiores es muy agradable. En caso de frío, se sugiere pintar el exterior para romper puentes térmicos y evitar pérdidas de calefacción.
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